Pelayo, líder de la resistencia asturiana, se enfrentó al dominio musulmán tras la caída del reino visigodo. Su lucha comenzó con el conflicto personal con Munuza por su hermana Elvira, y culminó en la decisiva Batalla de Covadonga (722). Este episodio marcó el inicio de la Reconquista y el nacimiento del Reino de Asturias.